01 Oct La producción de pecán en Norpatagonia
La región de Norpatagonia es considerada una zona marginal para la producción de pecán. Sin embargo, en el Campo Experimental de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional del Comahue existen algunos árboles de 42 años que han sido capaces de adaptarse a las condiciones agroecológicas locales. En la entrevista del mes, Julieta Saez de Cascallares nos comparte resultados preliminares de su trabajo de investigación que permiten vislumbrar un futuro prometedor para el cultivo de pecán en esta región.
1.¿Cuál es tu nombre? ¿A qué te dedicás?
Mi nombre es Julieta Saez de Cascallares. Soy Ing. Agrónoma y Doctora en Biología, docente-investigadora con dedicación exclusiva en la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional del Comahue (FaCA-UNCo). Mi cargo docente es jefe de trabajos prácticos en la cátedra de Fruticultura desde el año 2016. También soy becaria de post-doctorado en CONICET, investigando actualmente sobre la especie que nos convoca.
2. ¿Cómo llega el pecán a la región Norpatagónica?
Bueno, justamente lo que me interesó del cultivo fue indagar en cómo esta especie, considerada marginal para su cultivo en nuestra región, había sido capaz de adaptarse a las condiciones agroecológicas locales. En mi facultad existen algunos árboles de 42 años de Carya illinoinensis, y eso despertó la curiosidad e interés en esta especie, lo que me llevó a iniciar gestiones para la consecución de un lote de 20 plantas de nuevas variedades, que fueron implantadas en el invierno de 2012, en el campo experimental.
La producción de pecanes en Río Negro es sumamente incipiente, siendo una alternativa interesante para los productores frutícolas de la región, afianzados en el cultivo de frutales de pepita (peras y manzanas) y de carozo (duraznos, pelones, nectarines y cerezas) y, en los últimos años, más en el cultivo de algunos frutos secos, como nogales y almendros. Sin embargo, el cultivo de pecanes en esta zona presenta algunas limitaciones, como la baja fertilidad del suelo y la falta de adaptación de algunas variedades a las condiciones climáticas locales. La utilización de micorrizas puede ser una alternativa para mejorar el crecimiento y la producción de los pecanes.
Creo que el cultivo del pecán tiene un potencial inexplorado todavía en nuestra región, y que contamos con “la prueba” de que puede ser factible. Lo que falta es experiencia en el cultivo de pecán y por supuesto, de técnicos capacitados en su manejo, lo que muchas veces genera incertidumbre en quienes apostarían a iniciar un nuevo emprendimiento o reconvertir sus establecimientos productivos.
3. Cuando decís que cuentan con “la prueba” de que puede ser factible, ¿a qué te referís? ¿Han llevado a cabo estudios o trabajos al respecto?
En 2012-2013 comenzamos a indagar sobre la historia de los pecanes que se encontraban en el Campo Experimental de la FaCA-UNCo y también realizamos algunos seguimientos fenológicos de los ejemplares adultos presentes, a través una pasantía con una estudiante de secundaria. Luego, tras gestiones con el colega Esp. en Frutos Secos Guillermo Mantz, obtuvimos la donación de un lote de 20 plantas de nuevas variedades que fueron implantadas en el cuadro 10 N del Campo Experimental. Desde la cátedra de Fruticultura, realicé gestiones para la poda de formación, la fertilización y el riego de este lote. Por esos años, el mencionado lote comenzó a utilizarse básicamente con fines de docencia, puesto que diagramamos una colección de frutos secos con el equipo de cátedra. Se implantaron algunos ejemplares de Juglans regia(variedad Chandler y Cisco como polinizadora) y también algunos almendros.
En el año 2020, gracias a la ampliación del equipo de trabajo iniciada por el Ing. Mantz, pude relacionarme con el Dr. Ing. Agr. Santiago Maiale, y nos presentamos a la convocatoria de becas postdoctorales de CONICET. El plan de trabajo de investigación en el que me encuentro trabajando se denomina: «Estudio de la microflora asociada a plantas de pecán en el Alto Valle de Río Negro y su influencia sobre el contenido de nutrientes» y, más adelante ese mismo año tuve la oportunidad de aplicar a una convocatoria a presentación de proyectos de investigación de la Universidad Nacional del Comahue, para ampliar la misma temática. En ambas convocatorias salí favorecida, por lo que actualmente soy becaria de Postdoctorado en CONICET y directora de un proyecto de investigación de la UNCo, vigente hasta diciembre de 2024.
4. ¿Cuál es el objetivo del trabajo de investigación que mencionás?
Este trabajo busca aislar y caracterizar microorganismos fúngicos y bacterianos en la rizósfera de plantas de Carya illinoinensis (pecán) de una región marginal para su cultivo y estudiar la influencia de éstos sobre el contenido de nutrientes en la planta. Este plan permitirá en el largo plazo aportar soluciones sustentables a la nutrición de plantas de pecán en la región del Alto Valle de Río Negro.
Los objetivos específicos son:
- Analizar el contenido de nutrientes en tejido foliar de cultivares de pecán en el Alto Valle de Río Negro y caracterizar el perfil obtenido.
- Describir el comportamiento micorrícico (presencia/ausencia, tipo y abundancia de micorrizas) e identificar taxonómicamente los hongos micorrícicos asociados a plantas de pecán.
- Aislar e identificar taxonómicamente bacterias solubilizadoras de P y Zn de la rizósfera de plantas de pecán.
- Estudiar el efecto de micorrizas y bacterias solubilizadoras sobre la absorción de nutrientes y el crecimiento en plántulas de pecán.
5. ¿Podés comentar algún resultado preliminar?
Para este estudio, se utilizan dos conjuntos de plantas de pecán cultivadas en el campo experimental de la FaCA-UNCo; el primero de ellos consta de 5 ejemplares de cultivares tradicionales de 42 años y el segundo de 9 cultivares modernos de ciclo corto de 11 años de implantados.
Se recolectaron muestras de suelo, rizósfera y hojas. Se evaluó la presencia de hongos micorrícicos y de bacterias solubilizadoras de nutrientes, en especial de P y Zn y estimar el efecto de esta microflora sobre el crecimiento y el contenido de nutrientes en pecán. Se aislaron 4 hongos solubilizadores con un marcado potencial de solubilización de Zn, cuantificado en sus halos de solubilización de óxido de Zn (identificación taxonómica por PCR y secuenciación, en proceso). Estos cuatro aislamientos fueron productores de conidios. Los resultados obtenidos hasta el momento mostraron diferencias significativas en la microflora asociada a plantas de pecán crecidas en el AVRN, lo que indica una correlación positiva entre la diversidad microbiana y la captación de nutrientes limitantes como P y Zn.
Se realizó también un ensayo de vivero para estudiar el impacto de micorrizas en el crecimiento de plántulas de pecán. La micorriza comercial Glomus intraradices es de tipo arbuscular. Se aplicó en noviembre de 2021 y se midieron en el T0 y cada 1 mes los siguientes parámetros: calibre en la base del fuste, altura del eje principal y número de hojas. Se observaron diferencias significativas en el calibre medido en el cuello del fuste comparando el lote de plantas de pecán tratadas con Glomus intraradices vs. plantas control.
Otro resultado cuya evaluación no había sido prevista en los objetivos específicos fue que las plantas en macetas inoculadas con micorriza comercial mostraron menor porcentaje de muerte a causa de un período de sequía acontecido en la primera quincena de enero de 2023, y un rebrote más pronto respecto de las plantas sin tratar.
6. ¿Qué significan estos resultados en términos de probabilidades de que la especie desarrolle su potencial productivo en este entorno?
Los resultados obtenidos hasta el momento permiten aceptar la hipótesis inicialmente planteada, referida a que la microflora asociada a plantas de pecán crecidas en el Valle del Río Negro contribuye a incrementar su crecimiento y productividad dado que mejora la captación de nutrientes limitantes como P y Zn. Esta aseveración, sumado a los constantes avances científico-tecnológicos en relación al cultivo de Carya illinoinensis, como por ejemplo, obtención de variedades que se adaptan a diferentes requerimientos de frío y por ende a diferentes condiciones agroclimáticas, permiten vislumbrar un futuro prometedor para su cultivo en la región Norpatagónica.
7. De acuerdo a tu experiencia y conocimientos, ¿considerás que el pecán es una opción productiva viable para la región de Norpatagonia? En tal caso, ¿qué le dirías, o qué recomendación darías, a aquellos que estén interesados en incursionar en este cultivo?
En primer lugar, los invitaría a conocer las bondades de esta especie, tanto a nivel de su producción (por las características y beneficios para la salud que ofrece el consumo de la nuez pecán) como a nivel ambiental, constituyendo montes frutales perennes con una expectativa de producción promedio de 1 siglo de duración y que, al mismo tiempo, funcionan como pulmones verdes, tan necesarios en la actualidad. Y en segundo lugar, a quienes quieren apostar a este cultivo, les diría que se animen, que me parece una opción para la diversificación productiva y frutícola totalmente factible y con la posibilidad de intercalar otros sistemas y cultivos mientras se espera la plena producción de los árboles de pecán. Para ello, les recomiendo se acerquen a consultar siempre con profesionales ingenieros agrónomos, tanto de la FaCA-UNCo como del Clúster de Pecán; pueden ponerse en contacto conmigo (julieta.saez@faca.uncoma.edu.ar y podré asesorarlos o recomendarles a integrantes de mi equipo de acuerdo a sus inquietudes y necesidades).
8. ¿Contas con un equipo para llevar adelante este trabajo?
Sí, y de hecho en 2021, el equipo interinstitucional de profesionales que conformamos se fue ampliando y nos presentamos a una convocatoria de proyectos de extensión de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU). La propuesta de trabajo se denominó: “El cultivo de la nuez pecán en el Alto Valle de Río Negro (AVRN): del vivero a la implantación”, y obtuvo el financiamiento a partir de mediados del 2022. En este proyecto participan distintas instituciones (FaCA-UNCo, FCAyF-UNLP, INTA, CONICET) y actores, entre ellos docentes, no docentes y estudiantes de grado de la carrera Ingeniería Agronómica de la FaCA-UNCo. En 2022, se nos invitó a volver a inscribirnos a esta convocatoria, y la propuesta salió favorecida nuevamente en agosto de 2023, por lo que en resumen, a la fecha, dirijo un proyecto de investigación y otro de extensión (cuyo nombre sintético es “PECANES NORPATAGÓNICOS II”), hasta diciembre de 2024. Este tipo de proyectos hace posible el desarrollo y la continuidad de las tareas planificadas y favorecen el intercambio interinstitucional de conocimientos y opiniones a través de sus representantes, enriqueciendo las labores culturales que requiere el cultivo del pecán en nuestra región.
9. ¿Te gustaría agregar algo más? ¿Una consideración final?
En primer lugar, quiero agradecer al Clúster del Pecán la oportunidad de compartir mi experiencia sobre el cultivo del pecán en la región Norpatagónica argentina. Es un tema que me apasiona y en el que he estado trabajando y capacitándome durante la última década.
Quiero destacar la importancia de la colaboración y el trabajo en equipo en este campo. Mis proyectos de investigación y extensión no habrían tenido éxito sin la colaboración de colegas, estudiantes y otras instituciones. La cooperación interinstitucional es clave para avanzar en el conocimiento y la promoción de este cultivo en nuestra región.
También quiero enfatizar que, si bien hemos obtenido resultados prometedores hasta ahora, el cultivo del pecán es un desafío que requiere dedicación y paciencia. Los productores interesados en incursionar en este cultivo deben estar dispuestos a invertir tiempo y esfuerzo a largo plazo, pero los beneficios pueden ser significativos tanto en términos económicos como ambientales.
En resumen, creo firmemente que el cultivo del pecán tiene un gran potencial tanto en el Alto Valle de Río Negro como en la región Norpatagónica, y anhelo continuar mi trabajo en este campo y ver cómo evoluciona en los próximos años. Invito a todos los interesados a unirse a esta emocionante aventura y a aprovechar las oportunidades que ofrece este cultivo en nuestra región.